En primer lugar abriremos el compartimento donde está la bola, en su parte inferior, girando la tapa.Si ves que cuesta mucho girarla, ayúdate de un destornillador plano.
Una vez abierta, saldrá la bola. Esta suele coger suciedad, pero su limpieza es rápida. Coge un paño humedecido en alcohol y frota la bola, verás que sale la suciedad que tiene.
Otra opción es limpiarla con agua y jabón y después secarla.
En un recipiente echa un poco de agua y jabón del que tenemos para la vajilla, y limpia la bola ahí. Aconsejo la segunda opción, pues la bola quedará limpia completamente.
Ahora vamos a limpiar los rodillos que detectan el movimiento, que como ves en la foto, suelen coger mucha suciedad.
Puedes hacerlo con un destornillador, con un palillo de madera, con un bastoncillo de los oidos, etc.
Ve raspando suavemente la suciedad que tiene, con cuidado, y sacándola, ya que dejarla dentro te traerá problemas.Tienes que limpiar los dos rodillos, o en algunos casos tres, que puedes ver dentro.
Una vez todo hecho, volvemos a colocar la bola en su lugar y cerramos el ratón. Sólo tienes que volver a colocar la tapa inferior y girar en sentido contrario. Si de nuevo te cuesta girarla, ayúdate de undestornillador plano. Prueba ahora y verás que funciona mucho mejor.
Otra opción que tenemos es abrir el ratón, para lo que tendremos que quitar un tornillo que hay en la parte inferior, lo que nos permitirá limpiar más comodamente los rodillos, porque la bola siempre tenemos que sacarla tal como hemos explicado antes.
Si el ratón está en garantía, recomendamos que no lo abras, ya que los fabricantes o vendedores suelen poner una etiqueta justo encima del tornillo para abrir el ratón, así si rompes la etiqueta, automáticamente pierdes la garantía. En estos casos, no lo abras, sigue los pasos que hemos explicado.